lunes, 28 de septiembre de 2015

FC BARCELONA

El Barça se ha convertido, para millones de personas de cualquier parte del mundo, en un símbolo de identidad no tan solo deportivo, sino también social, político y cultural. En los momentos más difíciles ha sido la bandera de Catalunya y ha representado los anhelos de libertad del pueblo catalán, una simbología que continúa fuertemente arraigada a la idiosincrasia del club y a la masa social. En el contexto español, el Barça se ve como un club abierto y democrático. Y en el resto del mundo, el Barça se identifica con causas solidarias, concretamente con la infancia, a través de su acuerdo de patrocinio con Unicef.
Durante todo un siglo, el barcelonismo ha vivido momentos de gloria e infortunio, épocas brillantes y otras no tan exitosas, triunfos épicos e importantes derrotas. Y cada uno de estos instantes ha contribuido a definir la personalidad de un club que, por sus peculiares características, es único en el mundo.
Una historia más que centenaria  pasa necesariamente por etapas muy distintas, tanto bajo el punto de vista social como desde la óptica deportiva. Los primeros años (1899-1922), desde la fundación hasta la construcción del estadio de Les Corts, el Barça fue un club de fútbol que tuvo que singularizarse respecto a los otros equipos barceloneses, hasta devenir en el club de referencia de la ciudad. El Barça se convirtió en el club líder en Catalunya, y además apostó por acercarse a una sensibilidad catalanista que iba ganando cada vez más fuerza.